La meditación una de las técnicas más antiguas
que se conocen para lograr ponernos en contacto con ese YO interno que es donde reside la calma infinita, la alegría divina,
el mismo Dios en uno mismo.
Meditación es ser, simplemente, sin
hacer nada -sin acción, sin pensamiento, sin emoción. Simplemente, eres y es un deleite puro.
Nos permite superar el dominio absoluto
que nuestro proceso de pensamiento tiene sobre nuestra experiencia y nuestra manera de estar en el mundo. Darse cuenta de
que uno es el pensador de pensamientos mas que los pensamientos mismos, es tremendamente liberador.
La meditación nos permite ver lo
que es real más claramente, sin ser perturbados por lo que nos dicen nuestras mentes acerca de lo que podría o debería suceder.
Pues nuestras mentes nunca están en el aquí y ahora, sino que se hallan detenidas en el pasado o en el futuro.
Tal vez lo más importante que
la meditación hace por nosotros es incrementar nuestra capacidad para vivir en el momento presente, en el aquí y ahora.